En Credicorp, entendemos que proteger su patrimonio y administrar sus bienes de manera eficiente es fundamental para garantizar la estabilidad financiera a largo plazo. Una de las herramientas más efectivas para lograr esto es el fideicomiso, un documento jurídico que ofrece una serie de ventajas tanto para quienes desean proteger sus bienes como para aquellos que buscan alternativas más flexibles y seguras para garantizar sus inversiones.
Pero, ¿qué es exactamente un fideicomiso y cómo puede ayudarle? A continuación, se lo explicamos de manera sencilla.
El fideicomiso se basa en la palabra latina “Fiducia”, que significa “confianza”. En este caso, la confianza es depositada en un tercero, llamado fiduciario, quien se encarga de administrar temporalmente un activo o patrimonio, como si fuera su propietario legal. Sin embargo, el fiduciario es una figura neutral, que sigue las instrucciones acordadas por las partes involucradas. El objetivo principal de un fideicomiso es proteger y administrar los bienes en favor de uno o varios beneficiarios.
El fideicomiso puede ser utilizado para diferentes propósitos, pero en Costa Rica los más comunes son los siguientes:
Fideicomiso de Garantía: Utilizado para garantizar el pago de un préstamo.
Fideicomiso Patrimonial: Ideal para proteger una herencia o asegurar que la voluntad del propietario sea cumplida (por ejemplo, asegurando los estudios de los nietos).
Fideicomiso de Administración: Muy común para la administración de propiedades, como apartamentos.
Existen varias razones por las que un fideicomiso puede ser la mejor opción para proteger sus bienes. Algunas de las características más destacadas son:
Protección Total del Patrimonio: Los bienes dentro de un fideicomiso están protegidos por ley y son inembargables, lo que significa que no pueden ser afectados por deudas o problemas financieros del propietario. El patrimonio es autónomo e independiente, y los acreedores no pueden tocarlo.
Flexibilidad en la Administración: Un fideicomiso permite que el propietario designe a los beneficiarios de los bienes y tenga el control sobre ellos, aunque sea de manera indirecta. Además, es posible cambiar los beneficiarios si así se desea.
Ahorro en Impuestos y Costos: Con un fideicomiso, se puede diferir el pago de impuestos de traspaso hasta el final del plazo del crédito, lo que puede ser 15, 20 o 25 años después de la firma. Además, los honorarios de los abogados son generalmente menores que en el caso de una hipoteca, y el valor fiscal de la propiedad en la municipalidad no se verá afectado, manteniendo así los impuestos territoriales estables.
Resolución de Conflictos Más Rápida y Eficiente: En caso de incumplimiento contractual, los conflictos se resuelven bajo el Derecho Privado, lo que es más rápido, flexible y menos costoso que hacerlo bajo el Derecho Público.
El fideicomiso es una excelente opción si desea proteger sus bienes y asegurarse de que se gestionen de acuerdo con sus deseos. También es ideal para garantizar el pago de préstamos o para administrar activos de manera más eficiente, con la tranquilidad de que estarán protegidos de embargos y otros riesgos financieros.
En Credicorp, le ayudamos a entender cómo un fideicomiso puede beneficiar su situación específica. Con nuestra experiencia y conocimiento en el manejo de bienes y finanzas, podemos ofrecerle soluciones que se ajusten a sus necesidades, brindándole la seguridad y la tranquilidad que merece.
¿Listo para proteger su patrimonio? Contáctenos hoy y descubra cómo un fideicomiso puede ser la clave para una administración eficiente y segura de sus bienes.